Si hay algo que no se puede negar es que tus padres, desde el momento en que naciste se preocuparon (y se preocupan) por tu salud. Quieren que estés bien y que te encuentres bien todo el tiempo, porque tu salud para ellos es imprescindible para su propio bienestar. El vínculo que tienen contigo no lo tienen con ningún otro ser del planeta y como instinto natural, su afán de protección harán que tu salud sea lo primero en su lista de prioridades.
Desde una buena alimentación, pasando por una buena higiene a unos buenos hábitos de sueño, tus padres siempre han querido que te cuides y que aprendas una buena manera de mantener por ti mismo, una buena salud. A continuación vamos a comentarte algunas cosas que es más que probable que tus padres te dijesen cuando eras pequeño y que hoy, sabes que tenían toda la razón del mundo.
Lávate siempre bien las manos
Utilizamos las manos para todo y por eso deben estar siempre limpias. Aunque no veas los microorganismos que puedes tener en tus manos o las bacterias dañinas, las manos sucias pueden enfermarte de muchas maneras diferentes. Casi todas las personas no se lavan las manos el tiempo suficiente para mater los gérmenes que pueden causar infecciones.
Hay quienes no usan jabón e incluso hay personas, que ni se molestan en lavarse las manos.... Mojarse las manos con agua tibia, enjabonarse con jabón durante 20 segundos, frotarse las manos y frotarse el dorso de las manos y debajo de las uñas, enjuagarse bien con agua limpia y secar con aire o toalla es esencial para mantener unas manos bien limpias. Lavarse las manos adecuadamente reduce la propagación de la gripe, el resfriado y las enfermedades transmitidas por los alimentos.
El estrés es necesario solo en su justa medida
Cuando te asustas por las cosas, aumentas la cantidad de hormona del estrés liberada en tu sistema. El estrés es completamente necesario cuando tienes un guepardo persiguiéndote para comerte en su cena, pero es francamente perjudicial cuando se libera constantemente todos los días.
¿Necesitas un destructor de estrés rápido? El ejercicio constante te ayudará en esto. Una caminata rápida, subir las escaleras o unos minutos de saltos aumentará los químicos que se sienten bien en tu cerebro y ahuyentará a los malos... Si estás buscando una solución a largo plazo, puedes considerar realizar meditación o yoga a tu rutina diaria.
Duerme la siesta siempre que lo necesites
¿Recuerdas la siesta cuando eras niño? Sucede que algunos adultos muy famosos nunca dejaron de tomar siestas. Solo por nombrar algunos: Winston Churchill, Napoleón Bonaparte, John F. Kennedy y Thomas Edison eran fanáticos del descanso del mediodía. Tomar una siesta puede cambiar tu vida. amejor... tomar una siesta poderosa es bueno para tu cuerpo, mente y estado de ánimo.
Cuando duermes la siesta durante 10-20 minutos por la tarde, puedes aumentar la memoria, la resolución de problemas, la lógica, la percepción y el tiempo de reacción. La siesta también puede disminuir la presión arterial, reducir el estrés y ser bueno para el corazón. Entonces, la próxima vez que necesites más capacidad intelectual, coge tu almohada y toma una siesta.
Cuidado con la dilación de tu tiempo
Cuando se trata de hacer cosas pequeñas es mejor hacerlo cuanto antes para que no se vuelva demasiado pesado a medida que sea cumulan las tareas. Costará mucho menos a nivel emocional y económico.
Establecer una fecha límite es una buena estrategia para superar la dilación. La dilación puede ser contrarrestada mediante la implementación de sistemas tales como la rendición de cuentas a los demás, negociando consigo mismo para hacer las cosas, refuerzo positivo o recompensas por las misiones completadas y definiendo claramente la tarea en cuestión. Si dilas demasiado el tiempo, te estresarás y si te estresas constantemente acabarás empeorando tu estado de salud.