Si tienes un problema con la mentira es más que probable que acabes teniendo un problema de salud mental de algún tipo. Existen anomalías estructurales en los cerebros de los mentirosos patológicos. La corteza prefrontal, un área ubicada en la parte frontal de tu cerebro, te permite sentir remordimientos y aprender el comportamiento moralista.
Durante un estudio, 108 personas se realizaron una resonancia magnética. Esta prueba reveló que aquellos propensos a la mentira habitual tenían significativamente más materia blanca que sus homólogos, los sujetos de prueba honestos. Los que eran sinceros tenían más materia gris. Aunque no puedes ver los colores de la mente de alguien, hay otros medios para detectar un mentiroso patológico... tanto por si lo eres tú mismo como si quieres detectarlo en otros.
Se contradicen
Un mentiroso patológico siempre acaba contradiciéndose a sí mismo. Sus historias contienen inconsistencias sobre la ocupación, la educación y los antecedentes familiares. Un mentiroso patológico tiene dificultades para decir la diferencia entre lo verdadero y lo que es falso, de la realidad y de lo que intenta hacer creer a otros.
Con el tiempo, estas inconsistencias comienzan a desentrañarse, lo que facilita la detección de un mentiroso de alguien que está siendo sincero... Una persona que es mentirosa y se le descubre, generará desconfianza y por tanto, no será una persona que otras personas consideren para tener una relación interpersonal.
Pareces siempre nervioso
Independientemente de la cantidad de materia blanca que tenga una persona, lo que le permite mentir sin remordimientos, no es necesariamente una tarea fácil para esa persona. Necesita controlar sus emociones, manteniendo sus nervios a raya, mientras oculta la verdad. Esto puede llevar a un comportamiento físico que muestre su incomodidad, como mover los pies, tener incapacidad de quedarse quieto o pasar las manos sobre la boca y la cara con frecuencia durante la conversación.
Comportamiento a la defensiva
Uno de los motivos por los que un mentiroso miente es porque quiere manipularte. Si te das cuenta de sus inconsistencias, o simplemente tienes una pregunta que no está preparada para responder, su reacción natural puede ser de defensa. Recuerda, esa persona está trabajando duro para ocultar la verdad y que no te enteres... Si esa persona piensa que no le crees, ella puede sentirse extremadamente agitada o enfadada porque entonces su planes de manipulación están saliendo mal...
Dile que repita lo que está diciendo
Una solicitud de repetición acompaña su necesidad de hacerte creer su mentira tanto como él. Si encuentras algo extraño, o simplemente quieres saber más sobre el tema en cuestión, puede pedirle que repita la pregunta. Esto le da un momento o dos para idear una mentira que espera que creas. Si esto sucede con frecuencia durante la conversación, ten cuidado porque es probable que te esté mintiendo.
Si crees que eres una persona que miente aunque no quieras hacerlo, entonces será necesario que acudas al médico para que te derive a un profesional de salud mental. Será importante que evalúen tu estado mental para saber por qué mientes y que aprendas a acabar con ese hábito que puede acabar con tus relaciones personales.
Por otra parte, si conoces a una persona que es una mentirosa patológica, entonces es necesario que evalúes la relación con esa persona y si te merece la pena mantener esa relación tóxica. Recuerda que una persona que es tóxica puede drenar tu energía por lo que incluso, te puede hacer enfermar si permites que te manipule en exceso para conseguir sus pretensiones a costa de tu voluntad. Si tienes una relación con alguien que es demasiado tóxica, quizá sea importante que mantengas cierta distancia emocional hasta que al menos, seas capaz de mantener unos límites fuertes en la relación interpersonal y que no te manipulen más.