¿Ser delgado/a significa ser guapo/a?

Mientras la mayoría de nosotros/as vivimos pendientes de nuestro físico, haciendo dietas constantes para mantenernos delgados, yendo cada día al gimnasio para tener un físico envidiable, tenemos que tener en cuenta que la belleza no reside en eso.

Conforme pasan las décadas nos fijamos que el canon de belleza establecido varía y que son las modas las que imponen cómo hay que ser físicamente para ser supuestamente guapos. En la actualidad, el canon de belleza reside en personas delgadas, mujeres con una talla 34-36 y hombres con un torso de escándalo y unos pechos de acero, aunque esto puede crear en nosotros una inseguridad constante.

¿ Ser delgado/a significa ser guapo/a ?

Si pensamos en nuestro hombre o mujer ideal, lo primero que se nos viene a la cabeza es ese actor, futbolista con un físico espectacular y una cara dibujada o una supermodelo con una talla 34 y unas piernas kilométricas pero siendo realistas ¿A la hora de definir la belleza de una persona nos fijamos en los kilos?

Por norma general, para el ser humano una persona guapa no solo se compone de un físico. Atraer a los demás no es cuestión de físico, es cuestión de actitud por lo que luchar contra los kilos no es una tarea eficaz si lo que buscamos es sentirnos guapos/as.

Buscar estar delgados y bajar esos kilos que nos sobran como si no hubiera mañana nos lleva a tener una actitud de inseguridad

En la actualidad existen muchas enfermedades psicológicas que afectan a la salud debido a este tema. La anorexia y la bulimia están a la orden del día entre las personas de nuestra sociedad y este tipo de enfermedades se ha potenciado a partir de que los cánones de belleza han impuesto que para ser guapo/a hay que tener unos kilos de menos y estar delgados. Tener buena salud es lo que realmente importa, sin mirar tanto lo que marca la báscula.

Cada cuerpo tiene una composición, no todos podemos ser delgados y tener una talla 34, existen cuerpos endomorfos, mesomorfos y ectomorfos y dependiendo de cada persona va a tender a ser delgado, fuerte o gordo.

Buscar estar delgados y bajar esos kilos que nos sobran como si no hubiera mañana nos lleva a tener una actitud de inseguridad, de no estar nunca felices con nosotros mismos y esto hace que los demás lo perciban, lo cual solo consigue el efecto contrario del que buscamos. La seguridad en uno mismo, ser simpático con los demás, ponerse en el lugar del otro, sonreír y demostrar ser feliz, hace mucho más efecto en que el resto nos vea guapos y atractivos que el simple hecho de estar delgados.

No se trata de tener un cuerpo escultural si el resto de tu vida es vacía

No se trata de tener un cuerpo escultural si el resto de tu vida es vacía. Con esto no nos referimos a que tenemos que estar gordos para ser feliz, pero lo ideal es que gocemos de buena salud aunque presentemos unos kilos de más según los cánones de belleza. Ser feliz y mostrarlo al mundo es lo que nos va a hacer que los demás nos vean atractivos, guapos, inteligentes por lo que deberíamos estar menos pendientes en obtener el físico ideal para que los demás nos alaben y centrarnos más en disfrutar de la vida, de cada oportunidad que nos brinda el día a día, pasar tiempo con nuestra familia, nuestros amigos y realizar aquello que nos guste y nos aporte diversión.

No dejes que te impongan nada, no dejes que te digan lo que tienes que hacer para ser feliz, cada persona es como es y es eso lo que les hace especiales, bellas, atractivas y guapas. Lucha por tener buena salud, eso por supuesto. Pero vivir pendientes del qué dirán, de hacer cosas socialmente bien vistas para que los demás nos acepten nos nos va a hacer más felices por lo que tenemos que centrarnos en vivir nuestra vida sin preocuparnos en lo que pensarán lo demás y sí más en nuestra propia salud física y emocional.