La lumbalgia o dolor de lumbago consiste en un dolor localizado en la zona baja de la espalda que resulta muy molesta para aquellas personas que lo han padecido alguna vez. Solo la persona que ha sufrido de lumbalgia sabe cómo se sufre en esta situación. El dolor de lumbares se da sobre todo en personas cuya edad está comprendida entre los 30 y los 60 años y este se produce debido a un problema en la estructura de esta zona, ya sea en los tendones, músculos, raíces nerviosas o articulaciones. Este dolor que comienza en la espalda, irradia hacia toda la zona que se encuentra alrededor, por ello resulta tan molesta para aquellas personas que la padecen.
Síntomas de la lumbalgia
El síntoma principal de la lumbalgia es el dolor localizado en la parte baja de la espalda que irradia hacia las zonas colindantes con ella, pero puede combinarse con otros síntomas distintos como pueden ser:
- Dificultad en el movimiento de la persona que padece dolor de lumbago llegando al punto en el que el enfermo no pueda ni siquiera ponerse en pie, teniendo que quedarse tumbado hasta que el dolor remite.
- El dolor se propaga por diferentes zonas como son la ingle, la nalga, incluso hasta la parte superior del muslo, pero nunca llegará a la rodilla.
- Dolor que se intensifica cuando palpamos la zona.
- Espasmos de los músculos de la zona que pueden llegar a ser muy graves.
La intensidad del dolor puede variar desde una pequeña molestia en la zona hasta un dolor muy acusado y grave que no permitirá al enfermo moverse de la cama siquiera.
Causas y remedios para combatir la lumbalgia
El motivo o causa principal por la que podemos sufrir lumbalgia es la distensión muscular o de alguno de los ligamentos de la zona, que se produce cuando levantamos algún objeto muy pesado o cuando hacemos algún movimiento brusco y se nos lastima la zona baja de la espalda.
Por otro lado, también puede ser causa de la lumbalgia una lesión repentina en alguno de los músculos o en alguno de los ligamentos que mantienen la zona baja de la espalda.
En alguno de los casos anteriores lo mejor es acudir a tu médico que será el que te diagnostique si padeces lumbalgia y te recomendará el tratamiento que necesites en cada caso, aunque es muy aconsejable que las personas que se encuentren sumidas en esta situación de molestia o dolor en la zona del lumbago tomen los siguientes consejos.
Lo primero de todo es nada de actividad física. Cuánto menos nos movamos mejor, ya que durante los primeros días el dolor suele ser muy fuerte debido a la inflamación de la zona. Gracias al reposo, los músculos y ligamentos de lumbago irán poco a poco remitiendo en su inflamación y, por tanto, desaparecerá el dolor. Tampoco es recomendable suspender tu ritmo de vida normal durante muchos días ya que puede ocasionar un daño mayor.
Aplicar durante los primeros días en los que aparece el dolor bolsas de hielo o, en su defecto, algo frío de la nevera es ideal para bajar la inflamación y reducir el dolor. Por el contrario, cuando han pasado estas primeras horas, hay que realizar lo contrario. Aplicaremos calor con una manta eléctrica o una toalla caliente para que los síntomas terminen de desaparecer.
En el caso de que sigamos sufriendo fuertes dolores a pesar de estos dos consejos, deberás acudir al médico para que te recete algún tipo de medicamento analgésico que te ayude a combatir los dolores y la inflamación de la zona.
La lumbalgia se trata de una enfermedad bastante dolorosa, en la que el enfermo tiene que tratarse y curarse muy bien, ya que de lo contrario puede aparecer en ocasiones futuras.