Cuando un dolor de cabeza no desaparece con el paso de los días e incluso parece que empeora, es normal que se piense que podría ser un síntoma de algo mucho más grave, como un tumor cerebral. Los dolores de cabeza pueden ser un síntoma de tumor cerebral, pero cuando realmente está relacionado con esta afección suelen haber otros síntomas asociados como vómitos, convulsiones o problemas en la vista, cambios cognitivos, pérdida de conciencia o mareos.
Síntomas frecuentes
Los tumores cerebrales pueden ser cancerosos o no cancerosos (malignos o benignos), aunque los síntomas son parecidos. Los síntomas aparecerán dependiendo del lugar donde esté ubicado el tumor y del aumento de la presión intracraneal (la presión dentro y alrededor del cerebro). Los síntomas de un tumor pueden ser leves o graves, y en los casos más graves la vida puede correr peligro. En ocasiones, estos síntomas también son comunes en otras afecciones y es necesario tener un diagnostico adecuado en cada caso.
Los tumores cerebrales pueden ser cancerosos o no cancerosos Los síntomas de un tumor cerebral incluyen:
- Convulsiones. Las convulsiones pueden ser de diferentes tipos, pero en todo caso, deberán ser diagnosticados por un profesional y valorar si la convulsión es causada por el tumor o por otro motivo.
- Dolores de cabeza. La mitad de las personas que tienen tumores cerebrales sufren dolores de cabeza. Las cefaleas por tumores cerebrales son persistentes y se sienten como palpitantes. Suelen ser peor por la mañana y mejorar a lo largo del día. Incluso puede causar dolor en toda la cabeza. Existen otros síntomas asociados como vómitos, mareos, etc.
- Vómitos. Los vómitos (sobre todo por la mañana), con o sin náuseas pueden ser un síntoma de tumor cerebral, sobre todo si está acompañado con dolores de cabeza.
- Cambios cognitivos. Un tumor cerebral puede afectar a zonas donde está la cognición. Estos cambios pueden ser sutiles. Los cambios pueden estar asociados a la memoria (volverse más olvidadizo), problemas en la resolución de problemas de cualquier tipo, problemas de concentración, confusión, problemas espaciales...
- Pérdida de conciencia. Una pérdida de conciencia también puede ocurrir. La presión sobre el cerebro o la presión intracraneal muy alta puede hacer que ocurra una pérdida de conciencia. Una persona puede sentir fatiga hasta el punto de perder el conocimiento o que ocurra de repente. Dependiendo de la causa, una pérdida de conciencia puede derivar a un coma.
- Cambios en la personalidad y en el estado de ánimo. Los adultos con tumores cerebrales pueden experimentar cambios en la personalidad. Pueden reírse en momentos inapropiados, tener un súbito interés por el sexo, tener rabietas, volverse paranoico o tener conductas de riesgo. Incluso puede parecer que tengan problemas de depresión.
- Problemas de visión y audición. Algunos temores cerebrales pueden causar alteraciones visuales o auditivos. Los problemas de visión pueden hacer que las personas vean luces intermitentes, visión doble, borrosidad, pérdida de visión... en cuanto a las alteraciones auditivas, se puede perder audición o sentir zumbido en los oídos. Si la pupila se dilata será una emergencia médica.
- Cambios físicos. También puede haber cambios físicos en las personas que padecen tumores cerebrales. Esto puede causar torpeza, mareos o desequilibrio físico.
- Problemas en el habla. Cuando se tiene un tumor cerebral también puede ser que la persona mezcle palabras o que tenga dificultad para hablar con claridad. Incluso es posible que no comprenda bien lo que otros intentan explicarle.
Algunos temores cerebrales pueden causar alteraciones visuales o auditivosEstos son los síntomas más frecuentes de los tumores cerebrales, por lo que si sientes cualquiera de estos síntomas, tendrás que acudir a tu médico y que te haga todas las pruebas pertinentes en el hospital para descartar que se trate de un tumor. En caso de que sea así, se deberá valorar si es benigno o maligno y comenzar con el tratamiento pertinente.
