Hay quienes consideran el consumo de pornografía como algo normal en sus vidas diarias, pero puede convertirse en toda una adicción que te afecte a tu salud mental y también a tu vida diaria. Lo que separa a una adicción a la pornografía de un gran interés en la pornografía son las consecuencias negativas del comportamiento.
Con una adicción a la pornografía, el comportamiento se considera compulsivo, por lo que se pasaría una cantidad excesiva de tiempo viendo pornografía en lugar de interactuar con otros o completar tareas importantes. Además, el comportamiento persistiría incluso si perjudica tu profesión, tus relaciones o tu estado de bienestar.
¿La adicción a la pornografía es real?
Si bien muchos profesionales de la salud y psiquiátricos no consideran la adicción a la pornografía como una "adicción" en el sentido clínico de la palabra, las señales y síntomas a menudo son muy similares a los de la adicción al alcohol o las drogas. Hay muchos profesionales que quieren catalogar la adicción a la pornografía como un trastorno hipersexual, de momento no se puede catalogar como tal.
Adicción al sexo y trastorno hipersexual
Algunos psiquiatras han cuestionado si el comportamiento debe clasificarse como un trastorno compulsivo más en la línea de una adicción a las drogas o el alcohol. Su argumento se debe en gran parte a los cambios en la actividad cerebral que son sorprendentemente similares a los observados en los usuarios habituales de drogas.
Se sugiere que la adicción a la pornografía tiene un componente tanto fisiológico como psiquiátrico. Además, el comportamiento visual al menos cumple con dos de las cuatro condiciones clínicas asociadas con una adicción:
- Control deteriorado, por el cual hay un deseo de participar en una actividad así como intentos fallidos de reducir o controlar la actividad
- Problemas sociales, por los cuales no puede completar las tareas principales en el trabajo, la escuela o el hogar y / o ha dejado de intentarlo
Síntomas
- Tener pensamientos pornográficos incluso cuando no se ven escenas activamente
- Ver pornografía en contactos sociales donde puede ser pillado
- Sentir vergüenza, culpa o depresión por ver pornografia
- Ver pornografia a pesar de haber sufrido daños como dejar la pareja, el trabajo o problemas familiares
- Experimentar una reducción de la satisfacción sexual con un compañero cuando la pornografía no está involucrada
- Mantener el secreto con tu pareja
- Enfadarse cuando no puedes consumir pornografía
- Perder la noción del tiempo cuando ves pornografía
- No ser capaz de dejar de ver pornografía aunque lo intentes
Superar la adicción a la pornografía
Si tu visualización de pornografía se ha vuelto compulsiva e interfiere con cómo te sientes o en tu capacidad para funcionar, tienes que admitir que tienes un problema. Ese es el primer paso y el más importante de todos.
Independientemente de si la comunidad psiquiátrica considera la pornografía como una verdadera adicción o no, es importante que la trates como tal. Descartarlo como "un problema menor" a otras formas de adicción puede permitirle tomarlo menos en serio y no debe ser el caso.
Necesitarás encontrar a un profesional que tenga experiencias en tratamientos de disfunciones sexuales. Habla con tu médico para que te derive a uno en caso de que no puedas costearte uno privado. Tendrás que encontrar también a un psicólogo para que te ayude a través de la terapia cognitiva conductual y puedas comenzar a desarrollar habilidades efectivas de prevención de recaídas.Si bien puede ser incómodo exponer verdades sobre tus comportamientos y pensamientos, hacerlo puede garantizar los resultados más efectivos y duraderos.
Solo cuando aceptes que tienes una adicción y lo cuentes a los profesionales que te ayudarán, podrás hacer preguntas importantes sobre ti y encontrar soluciones para hacerte más feliz y hacer que tu vida sea más estable y productiva. Así que si realmente crees que tienes una adicción a la pornografía, ¡está en tus manos poder superarlo cuanto antes y volver a tener el control sobre tu vida!