Los ataques de pánico o ansiedad son experimentados cada día por muchas personas. Si sufres ataques de pánico o lo has padecido alguna vez, estoy segura de que sabrás lo incapacitante que pueden resultar. Por eso es necesario que conozcas algunas técnicas para poder superar estos ataques y que así no vuelvan a afectarte nunca más o al menos no con tanta gravedad.
Muchas personas experimentan ansiedad y ataques de pánico de forma regular, es una experiencia muy debilitante y que sufrirlo de forma continua puede afectar gravemente a la calidad de vida de la persona. Los ataques de pánico pueden ser aterradores sin nunca antes se ha experimentado, pero no tienen que ser todos los ataques de pánico iguales, las personas pueden sentirlo de formas muy diferentes.
Algunas personas sienten que es una sensación surrealista o una sensación de estar fuera de control, mientras que otras experimentan una sensación de muerte inminente. Una persona puede tener náuseas, las palmas sudorosas, mientras que otro puede sentirse muy débil, temblar e incluso que le falte el aire. Son muchas las emociones y los síntomas físicos que puede experimentar una persona cuando está sufriendo un ataque de pánico. La ansiedad no se cura, pero sí se puede tratar y controlar, por eso no te pierdas las siguientes técnicas para superar un ataque de pánico o de ansiedad.
1. ¡Respira!
Cuando se produce un ataque de pánico hay cambios en la respiración ya que las personas tendemos a respirar de forma más rápida y de forma poco profunda. Se acelera el ritmo cardíaco y parece que es difícil calmarse y relajarse, pero si se toma el control de la respiración se podrá tener el control de la situación.
Si alguna vez has ido a una clase de yoga sabrás cómo debes concentrarte en tu respiración, si no has ido nunca te aconsejo que vayas o que veas tutoriales en Internet para aprender a hacerlo. Es necesario que aprendas técnicas de relajación rápidas con respiración para controlar tus nervios, tu ansiedad y cuando empieces a notar que un ataque de pánico está siendo inminente. La respiración deberá ser profunda y venir del vientre, deberás inhalar y exhalar de forma lenta. Empezarás a tener control sobre tu ritmo cardiaco y el ataque de pánico simplemente se esfumará.
2. Deja que los pensamientos catastróficos se vayan
Por lo general un ataque de pánico se desencadena por algún tipo de pensamiento catastrófico, pero esto es diferente para cada persona. Puede ser que pienses que vas a hacer el ridículo o que no vas a poder salir de una aglomeración de personas... este tipo de pensamientos te hará sentir ansiedad porque tu cerebro reaccionará pensando que está en peligro.
Debes buscar cuáles son los factores desencadenantes y utilizar el diálogo interno para poder combatirlos. Si se trata de que un recuerdo es el desencadenante deberás pensar que no estás en esa situación en la realidad. Si piensas que lo que te causan los ataques son situaciones concretas como que quizá hagas el ridículo en un momento determinado, entonces es necesario ser realista y ver en perspectiva el problema. ¿Qué es lo peor que puede pasar? Cuando pienses en las consecuencias reales de los casos podrás dejar a un lado todo tu miedo.
3. Distrae tu mente
Si sientes que un ataque de pánico se acerca no te centres en los síntomas de pánico y angustia, porque si lo haces sólo estarás amplificando que ocurra. Una técnica para aliviar y superar los síntomas de pánico es distraerte y realizar otra actividad diferente a la que estás en ese momento puntual. Por ejemplo si estás conduciendo o si estás a punto de que te hagan una prueba médica en el hospital, puedes cantar una canción que te gusta.
Si estás en una situación social que te incomoda puedes comer un caramelo y centrarte en él. Si cambias tu foco de atención por otro diferente, te darás cuenta cómo tu ataque de pánico o ansiedad se disipa rápidamente.
Otra forma de distraer la mente del foco que puede desencadenar un ataque de pánico puede ser llevar una goma elástica en la muñeca. Cuando te venga un pensamiento catastrófico o sientas que la ansiedad se acerca, estira la goma y permite que te golpee. Al sentir dolor tus pensamientos se interrumpirán y se centrarán en el dolor que sientes en la muñeca, se distraerán del foco y no habrá ataque de pánico.
4. Realizar alguna actividad que requiera movimiento
Si eres capaz de distraer tu mente para no centrarte en el foco de atención que te afecta y que puede desencadenar un ataque de pánico, entonces para que no vuelva deberás ser capaz de salir de la situación que te genera esa ansiedad, así podrás ayudar a que el ataque de pánico se disminuya con rapidez. Puedes salir a pasear a un parque y que el aire fresco te ayude a calmarte.
Alternativamente, si no puedes salir de tu ubicación puedes pensar en encontrar algo para que puedas redirigir tu energía como organizar tu escritorio, guardar libros, limpiar los platos, barrer el suelo... cualquier cosa que sea productivo y que te ayude a que tu energía se focalice en otro punto te ayudará a calmarte como una respuesta positiva a un ataque de pánico.
5. Cuenta con el apoyo de alguien de confianza
En ocasiones, es necesario dejar que alguien sepa que estás experimentando un ataque de pánico, con esto podrás ayudarte a disolver el problema. Si cuando te ocurre un ataque de pánico estás en el trabajo puedes hablar con un compañero de confianza o con alguien que también sufra ansiedad ya que entenderán mejor lo que te está ocurriendo.
Si experimentas estos episodios de pánico o ansiedad, es necesario que tengas estas 5 técnicas presentes para poder llevarlas a cabo y que tus ataques de pánico disminuyan para siempre. Recuerda que padecer ataques de pánico o tener ansiedad no es algo de lo que debas o tengas que avergonzarte.
Pero si estos consejos no son suficientes para ti y no puedes afrontar y superarlos, entonces será necesario que acudas a un terapeuta para saber exactamente cuál es el origen y buscarle una solución. Debes saber que un ataque de pánico puede ser superado si se trata y tienes voluntad de afrontarlos.