Cómo se trata la bronquitis aguda y crónica

La bronquitis aguda y crónica se tratan con enfoques fundamentalmente diferentes, aunque hay algunos tratamientos que se pueden usar para ambas afecciones.  En general, la base de la terapia para ambas dolencias se basa en mejorar la calidad de vida, promover una respiración óptima y reducir la tos. Una vez que se sabe cómo mejorar la calidad de vida, la persona afectada vivirá mucho mejor.

Los tratamientos más comunes para la bronquitis aguda incluyen descanso y tratamiento sintomático cuando la inflamación es el resultado de una infección viral. Cuando la causa es una infección bacteriana, también se pueden usar antibióticos.  La bronquitis crónica, por otro lado, se trata con medicamentos que disminuyen la inflamación de los bronquios, como los esteroides inhalados u orales, así como modificaciones en el estilo de vida, como dejar de fumar.

Remedios caseros

Si tienes bronquitis aguda o crónica no tendrás que ser hospitalizado (probablemente). Pero es necesario que cambies tu estilo de vida y tengas muy presente algunos remedios caseros para incluir en tu vida a partir de ahora:

• Evita el humo. Tanto la bronquitis aguda como la crónica pueden verse exacerbadas por el humo del cigarrillo, los inhalantes industriales y los vapores del ambiente, como el humo de una barbacoa. Siempre que sea posible, tendrás que estar alejado de los irritantes inhalados, ya que pueden inducir una reacción inflamatoria aumentada de los bronquios. 

• Humificadores en tu hogar. El uso de un humidificador puede aliviar las molestias cuando se tiene bronquitis aguda y, a veces, esto también ayuda con la bronquitis crónica. Los humidificadores agregan humedad al aire, lo que facilita respirar y disminuir la mucosidad. Incluso puede aliviar parte del dolor que se produce al respirar aire seco.

Cuando se tiene bronquitis aguda es primordial descansar porque te sentirás cansado todo el tiempo

Otros remedios para la bronquitis aguda

Cuando se tiene bronquitis aguda es primordial descansar porque te sentirás cansado todo el tiempo. también es importante ingerir líquidos (mejor si es agua) ya que cuando se tiene cualquier tipo de infección respiratoria es importante porque necesitas mantenerte hidratado, lo que ayuda a diluir el moco en el pecho y la garganta.

También puedes utilizar sin receta descongestivos, analgésicos para el dolor, paracetamol si tienes fiebre o medicamentos si tienes tos, como por ejemplo, los jarabes de venta libre. Aunque si tienes fiebre y demasiada tos también puedes acudir a tu médico para que te recete el medicamento más adecuado según tu caso.

Otros tratamientos con receta también pueden ser valorados por tu médico para mejorar tu calidad de vida, como la toma de antibióticos si tienes infección viral, el uso de broncodilatadores, la toma de esteroides orales cuando los síntomas empeoran considerablemente o medicamentos que traten la inflamación asociada con la enfermedad pulmonar.

Hay una serie de terapias alternativas utilizadas para la bronquitis

Otras alternativas

Hay una serie de terapias alternativas utilizadas para la bronquitis, y algunas han sido sometidas a investigaciones por lo que aunque los resultados aún son limitados, los resultados pueden ser bastante efectivos. Algunas de estas alternativas son:

• Aceite de eucalipto. El eucalipto puede poseer propiedades antivirales; el uso del aceite con una inhalación de vapor de eucalipto  puede disminuir algunos de los síntomas de la bronquitis aguda.

• Remedios herbales. Los remedios verbales que puedes preguntar en tu herbolario pueden ayudarte a aliviar los síntomas de la bronquitis aguda. Es importante que preguntes bien y te informes por profesionales para saber cuáles son las mejores opciones para ti.

• Té de olmo. El olmo en té puede ayudar a aliviar el dolor de garganta que puede estar asociado con la bronquitis. El olmo contiene mucílago, una sustancia parecida a un gel que puede reducir la inflamación. 

Si a pesar de todo esto sigues sintiendo bastantes molestias, entonces será necesario que acudas a tu médico para que valore tu estado de salud y pueda encontrar el mejor tratamiento adecuado a tus circunstancias actuales. Es importante que encuentres el modo de mejorar tu calidad de vida.