La mayoría de las veces no llegamos a comprender los términos y conceptos que emplean los profesionales médicos, incluso cuando ya han tratado de explicarnos de qué se trata. Esto se acentúa mucho más cuando se trata de realizarnos una prueba médica, en la que la primera pregunta al profesional suele ser enfocada hacia el dolor que nos puede generar, pero no a comprender cuál es la función de dicho examen clínico. ¿Doctora me va a doler? pueden ser las primeras palabras que emitimos después de saber que nos tendrán que hacer una urodinamia, pero, ¿sabemos exactamente qué es? Hoy vamos a arrojar un poco de luz y vamos a informaros de todo lo relativo a uno de los exámenes médicos más extendidos y que con mayor frecuencia se lleva a cabo en urología; la urodinamia.
¿Qué es la urodinamia?
La urodinamia es simplemente un estudio especializado en las vías urinarias, es decir un examen urológico, para valorar el correcto funcionamiento del tracto urinario, los músculos que conforman la zona inferior del aparato urinario.
Es una prueba sencilla y eficaz por la que se puede llegar a conocer el estado del aparato urinario y a su vez saber si existe alguna anomalía en el mismo. Lo que se busca al realizar esta prueba es reproducir un ciclo miccional, es decir simular el llenado y el vaciado de la vejiga y cómo se comportan los músculos de la misma. Para ello, se realiza este tipo de examen urológico que a pesar de ser invasivo - por eso se intenta no realizarlo en todos los pacientes-, no es nada doloroso.
El procedimiento médico que se realiza con la urodinamia es muy similar a otros de urología, consiste en introducir una sonda por la uretra y otro por el recto, ambas pequeñas y flexibles. La sonda primera llevará el líquido que será depositado en la vejiga para medir cómo actúan los músculos de esta y la presión a la que se está sometiendo. La segunda sonda es utilizada para medir la presión abdominal durante toda la urodinamia. Una vez introducidas las dos sondas, el paciente tendrá que sentarse en una máquina de urología, llamada uroflujómetro, parecida a un inodoro, con la que se podrá comprobar el nivel de incontinencia del paciente.
La duración aproximada de la prueba es de una media hora y la inducción de la sonda se realiza con gel que contiene anestesia local para que no resulte dolorosa. Es una intervención ambulatoria que no requiere anestesia general, ni tampoco ir en ayunas. Usualmente, el paciente durante el día de la prueba puede presentar molestias o ciertas dolencias al orinar, puede también aparecer sangre, pero no es preocupante. Días antes de la prueba, el urólogo puede recetar al paciente algún medicamento o enema para facilitar el procedimiento.
La información que se consigue a través de la urodinamia es realmente valiosa, pues una vez detectada la afección del paciente es muy sencillo de solventar, en la mayoría de los casos el paciente, tras la urodinamia, será tratado con fisioterapia, otras con medicamentos, y tan solo un minoritario grupo requerirá intervención quirúrgica.
¿A qué pacientes le realizan una urodinamia?
Como se ha expuesto anteriormente, a través de la urodinamia se pretende conocer el funcionamiento de llenado y vaciamiento de orina en la vejiga y descartar así posibles anomalías que pudiera presentar el aparato urinario.
La urodinamia es una prueba destinada principalmente a determinar el por qué de la pérdida involuntaria de orina por la uretra - un problema que afecta a gran parte de la población, sobre todo a mujeres de más de cincuenta años-, pero también el médico puede solicitar dicha prueba para determinar otras afecciones como, por ejemplo, infecciones urinarias recurrentes, ardor al orinar, mielodisplasia, trauma medular, daño cerebral, etc.
Por tanto, la realización de esta prueba puede ser tanto a menores como adultos que sufran de incontinencia ya sea por esfuerzo, urgencia o mixta.
Cuando se dice que el paciente posee incontinencia urinaria mixta, la más frecuente, se debe a que tiene incontinencia por esfuerzo y también por urgencia. Es decir, el paciente siente una necesidad urgente de orinar que es incapaz de posponer, esto sería incontinencia por urgencia y merma la calidad de vida del paciente. Por otro lado, la incontinencia por esfuerzo sería la pérdida leve e involuntaria de orina asociada a esfuerzos como; subir las escaleras, reír, toser... La urodinamia es una forma de conocer de dónde provienen esas incontinencias y poner solución a tal afección.
Es muy importante que a la prueba se acuda con ganas de miccionar, puesto que la primera parte será orinar en un recipiente para posteriormente analizarlo tras la urodinamia.
Finalmente, tal y como expusimos anteriormente, no es una prueba dolorosa, aunque sí algo embarazosa, posteriormente el médico puede recetar un tratamiento para prevenir posibles infecciones por la utilización de las sondas.