La venta ilegal de medicamentos nos puede hacer pensar en que estos son algún tipo de drogas prohibidas en nuestro país, pero nada más lejos de la realidad. A día de hoy, la venta de medicamentos tanto de curso legal como ilegales en nuestro país resulta hasta 25 veces más
rentable económicamente que la venta de drogas como el hachís, la cocaína o la heroína, al mismo tiempo que las sanciones económicas y las posibles penas de cárcel son comparativamente muy inferiores. Estos dos factores, rentabilidad y un relativo bajo riesgo, ha hecho que el mercado de la venta de fármacos y medicamentos ilegales se dispare en los últimos años, sobre todo desde que este negocio se sumó a Internet.
Un mercado rentable
Estos datos son alarmantes, pues la Organización Mundial de la Salud (OMS) cifra en un 50% la cantidad de medicamentos y fármacos comprados por internet que ocultan su verdadero origen. Por su parte, el CHMP, la Central Humanitaria Medico-Farmacéutica, concluye en sus estudios que la compra por internet de medicamentos ilegales suele estar asociada en un 90% de los casos a fraudes y estafas.
Para ejemplificar y hacernos a la idea del semejante volumen de medicamentes ilegales y fármacos que se comercializa por internet y el rendimiento que los estafadores sacan, se calcula que, por ejemplo, la viagra, un fármaco para combatir la disfunción eréctil, tiene un coste de producción de 0,05 dólares en China o India. Este se puede llegar a vender online por 3 dólares, lo que representa un 6000% de beneficio, y si lo comparamos con el precio que este fármaco tiene en la calle, se dispara hasta un 20.000% de beneficio, dependiendo del canal de distribución.
Medicamentos para el alzhéimer, la depresión, la impotencia, el sida o para el dolor de cabeza o el cáncer son algunos de los más demandados, anclándose en la desesperación de muchos pacientes que se ven rechazados por razones clínicas y recurren a otros medios, poniendo en grave riesgo su salud.
Este es un nuevo e incipiente mercado, pues solo entre 2006 y 2009 se llegó a triplicar la incautación de productos en aduanas en la zona de libre comercio de la Unión Europea, lo que representa 7,5 millones, pudiendo dispararse un 60% en países en vías de desarrollo, con menores controles.
Aparte de la venta ilegal de productos ilegales, como decimos, también está la venta ilegal de productos legales. El estudio Pfizer detecto que en un 80% de los medicamentos comercializados por internet de curso legal pero vendidos de forma ilegal, en el 80% de los casos estos solo contenía entre un 30 y un 40 % de contenido de principios activos, dejando el restante porcentaje a aditivos y sustancias perjudiciales para nuestra salud.
Y es que el principal problema de la compra de fármacos y medicamentos ilegales por internet no es solo que nos puedan estafar con el producto, la cantidad o el precio, es que con una variedad de más de 200.000 fármacos, estos pueden contener ingredientes tóxicos combinados con los farmacéuticos. Las falsificaciones no son fáciles de detectar, pues se copian colores, impresiones, envoltorios y hasta los diseños web de las páginas legales con el fin de hacer creer al consumidor que está haciendo un pedido legal.
Tal es el calibre del problema que la OMS ha publicado la guía Medical Products and the Internet cuyo objetivo es informar al consumidor y a los usuarios en general sobre el proceso de estafa, los riesgos y las diversas problemáticas asociadas.
Entre los posibles riesgos que supone la compra de productos de farmacia en internet, el informe señala: falta de seguridad y garantía de la eficacia; instrucciones que para el uso pueden ser inapropiadas; calidades no garantizada; los productos pueden ser fraudulentos y nocivos para la salud; los fármacos de adquisición transnacional pueden estar prohibidos en algunos países o que los productos con la misma denominación pueden ser diferentes en distintos países, llevando a graves equívocos con las sustancias o cantidades.
España, en el objetivo de las estafas
En el caso de España, a pesar de los esfuerzos de las autoridades, más de la mitad de los medicamentos ilegales que circulan por la red son falsificaciones que suponen riesgos para la salud, que incluyen tóxicos y la posibilidad de crearnos problemas graves en nuestra salud. En España esta prohibió vender por internet medicamentos de prescripción. Pero la red es muy amplia y un usuario puede comprar medicamentos en webs extranjeras haciendo que la única medida efectiva realmente sea que los ciudadanos no compren medicinas de forma online y estén alertados e informados de los riesgos y consecuencias.
Aquí hemos introducido el matiz de medicamentos con receta, pues lo que sí es legal es adquirir legalmente calmantes y antiinflamatorios, como el paracetamol o el ibuprofeno, o antiácidos y jarabes para la tos en las farmacias que las autoridades sanitarias acrediten, pero siempre de forma presencial, o atreves de sus propias webs reguladas.
Sólo las farmacias físicas con la licencia de Farmacia podrán vender fármacos a través de internet. Así, con el fin de que los clientes puedan identificarlas como lugares de venta seguros, éstas han de tener en la página un logotipo que certifica que tienen permiso para vender medicamentos. Se trata de un permiso avalado por la Unión Europea y con un nº de registro. Aunque este, consta que también se puede llegar a falsificar.
Europa a la cabeza legislativa
A pesar de los diversos esfuerzos de autoridades tanto a nivel nacional como europeo, en 2012 la venta se ha seguido disparado, incrementándose en solo un año en un 87%. A lo largo del año 2013, se han incorporado las recomendaciones de la Directiva 2011/62/UE de medicamentos falsificados. De la misma manera, se ha actualizado la normativa de distribución de medicamentos de consumo humano, y se ha aprobado un nuevo Real Decreto que regula los requisitos para la venta legalizada de medicamentos a través de la red.
En conclusión, debemos de tener claro que tanto si por la razón que sea nos planteamos la idea de adquirir medicamentos por internet en farmacias no acreditadas o en webs de dudosa reputación, lo que vamos a obtener es un medicamento ilegal que, aparte de no resolver nuestro problema, nos generará nuevas dolencias debido a sus contenidos tóxicos. Aunque pensemos que "es solo una pastilla" o "es todo natural", no sabemos a ciencia cierta de qué sustancias se componen, ya que no han pasado los controles requeridos a nivel Europeo. Por ello, recurre siempre a tu médico y a las prescripciones por escrito que te haga tratando d evitar a toda costa la automedicación y la adquisición por tu cuenta de fármacos.